En
mi modesta opinión, no estamos aquí (en Slumberland)
ni para hacer malas críticas (por lo menos yo), ni para reseñar los
tebeos que sabemos malos de antemano. Lo que esta revista trata de
hacer (o eso creo yo) es informar y, en última instancia, recomendar
todas aquellas novedades que puedan ser interesantes, teniendo en
cuenta el amplio sector del público al que se supone está
informando. Por eso mismo, Kyrie,
de Miguel Ángel Martín supone una de esas novedades que, dejando de
lado la indiscutible calidad, son importantes como propuesta
editorial. En un mercado tan moribundo como el nuestro (porque lo
está, no nos engañemos), tebeos como el que nos ocupa podrían
significar una especie de oasis en ese desierto de superhéroes,
mangas que nadie compra y productos balbuceantes que no consiguen
cuajar en ninguna parte, ya sea por mal hechos o por mal
distribuidos.
La
gente de la Factoría de Ideas está probando con esta obra un camino
alternativo e independiente que, a bien seguro, dará qué pensar al
lector de tebeos que ahora mismo se debate entre el tebeo de toda la
vida al que le han cambiado los colores y el papel y la última
novedad del país del sol naciente, de la que sabe poco o nada. Creo
que es un camino que deberíamos seguir todos (manteniendo, claro,
las publicaciones que nos permiten sobrevivir) para que el panorama
nacional sea, como mínimo, interesante en el futuro.
P.D.:Sí,
ya sé que no he dicho nada del tebeo y me he dedicado a pontificar
sobre el estado actual de la industria y demás, pero siendo una obra
de M.A. Martín, la calidad se da por supuesta.
Slumberland nº 14, 1996
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